2012


lunes, 18 de marzo de 2013

Otra trasnochada y van...

Para ahogarse che.
ella tiene la jodida
suma del poder publico,
dice NO y se acabó.

Ademas lo ejerce macabramente,
ilegalmente reclama un corazón desahuciado
que fue expulsado de su rincón paradisíaco.

Y justo cuando vas a llorarle a Gardel
reincide en su ejercicio abusivo
no atendiendo plegarias
ni mensajería de texto,
bañándose con indiferencia
como si tuviera la pastilla del olvido.

¡Joder tio!
las penas no son de las vaquitas
mucho menos ajenas,
son mías, toditas mías.


y de nuevo se hizo muy muy tarde

domingo, 10 de marzo de 2013

Bajominguero


Cuando no puedo pegar un ojo y la noche se me vuelve una pendiente intransitable, me acuerdo paso a paso en como ardimos inútilmente. Te vi sentadita y en paz apagando un pucho sobre un lienzo que te daba repulsión por los olvidos que te hacían recordar; se me trabó la mandíbula, nunca fue mi oficio el prender quimeras como vos prendías y apagabas un cigarrillo tras otro. Una tremenda incoherencia tuve que hilvanar para sacarte una sonrisa y como te tuve que insistir para que tomemos un café, nuestro café. 

Después vino lo de siempre, creernos fuera de la rutina por andar auto regalándonos libros de saldos editoriales, o por tomar mate trasnochados y alejarnos de los tópicos mientras arruinábamos cualquier mueble bajo el concepto y justificativo de estar haciendo “arte plástico”. 

Que absurdo es todo cuando no dormimos y vemos la verdadera realidad: sabernos condenados antes de cometer el delito, reprimidos antes de salir de la coraza… dos niños que se conocen en la guardería y que les resta una hora para hacer y deshacer su amistad.