Que cosa esta vida con forma de rueda que nos hace tomar un café
a nosotros después de toda el agua que bajo por este rió y pasó por este puente.
Como si fuéramos dos adultos fuera de temporada, ¡pero no! Te
encargas de hacerme notar que sigo siendo un niño, con sus preocupaciones de
invertir su tiempo y dinero en cine/teatro/discos/libros, y vos con ese saquito
en V con pinta de mujer que sabe bien clarito lo que quiere.
Igual es lindo saber que seguís sonriendo, que tu carcajada
viene seguida de tu muela de juicio expuesta al público, me llena y alcanza con
eso, con tu felicidad que siempre fue la mía.
Como añoro eso que fuimos, ese “nosotros contra el mundo”.
Ahora la ruta es la ruta y la distancia es la distancia,
pero yo no aprendí a seguir adelante sin mirar atrás buscándote.